Cruzada por la paz

La opinión de…

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GABRIEL D. ROSANÍA V.

La Cultura de Paz es una directriz de la ONU, es un conjunto de valores, actitudes y comportamientos que rechazan la violencia y previenen los conflictos, procurando abordar sus causas para solucionar problemas mediante el diálogo y la negociación, teniendo como piedra angular el respeto de los derechos humanos.

Los ámbitos de esta Cultura de Paz son: Promover una cultura de paz por medio de la educación, el desarrollo económico y social sostenible; el respeto de los derechos humanos; Garantizar la igualdad entre mujeres y hombres; la participación democrática, la comprensión, tolerancia y solidaridad; Apoyar la comunicación participativa y la libre circulación de información y conocimientos y Promover la paz y seguridad internacionales.

Al margen del sensacionalismo que despierta la crónica roja, es necesario analizar los datos reales sobre la criminalidad.  La incidencia de los hechos punibles es mayor por el crecimiento demográfico, movimientos migratorios, sincretismo, materialismo, avaricia, pérdida de valores y, en general, las causas esbozadas por los especialistas de las Ciencias Criminales, Médicas, Sicológicas y Sociológicas.

Han surgido movimientos por la paz que pretenden hacer un diagnóstico de la inseguridad y criminalidad en el país, para enfocarse en una serie de puntos tendientes a frenar el flagelo de la violencia. No obstante, cualquier movimiento de este tipo, para que tenga éxito, requiere tener claro el significado y alcance de la “ paz ”. ¿Estado de tranquilidad o quietud? ¿Fin de una guerra? ¿Entendimiento y buenas relaciones entre los grupos, clases o estamentos sociales dentro de un país? ¿Estado interior, exento de cólera, odio y de sentimientos negativos? ¿Énfasis en minimizar y erradicar solo algunas conductas delictivas?

La “ paz ” va más allá de un interés personal o grupal, un romanticismo épico o una conceptualización vaga. La paz denota un equilibrio social, que incluye la eliminación o neutralización de conductas, prácticas y costumbres nocivas para la salud y armonía corporal, mental y sicológica de todos.

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Artículo publicado el 26 de marzo de 2010 en el  Diario La Estrella de Panamá, a quienes damos, lo mismo que al autor,  todo el crédito que les corresponde.

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