El MEDUCA: Cambios y propuestas

La opinión del Abogado…

Julián Morán  

Para mejorar nuestro sistema educativo se ha sugerido: Reforma educativa, doble jornada, cambios en las estructuras académicas, textos, evaluaciones, aumento de horas o minutos clases, formación permanente de los facilitadores, laboratorios informatizados, disminución de los bachilleratos, transformación curricular, traer la experiencia educativa de otros países. Ante esto propongo revisar:

Nuestro año escolar, dado que hay muchas cosas que crean conflictos: novatadas, reinados, días cívicos, saraos, aniversarios, ferias, paseos de reinas, elecciones para diputados juveniles, cada uno de esos hechos podrán tener su justificación, pero al final, días sin estar en las aulas. Los exámenes bimestrales se efectúan al término de cada bimestre, durante ocho días, por lo que son treinta y dos días sin dar clases, pues los estudiantes hacen su examen y se van para sus casas.

El cuarto bimestre comienza en noviembre, mes de desfiles, que por cierto se han multiplicado, hasta el punto que este bimestre, se reduce a unos diez o quince días clases y si no pregunte a los que se gradúan todos los años: Exámenes, reválidas, paseos, práctica de graduación, cenas bailables o de graduación, sesiones de fotos. En consecuencia el año podrá comenzar en enero, pero si se siguen con los mismos vicios, no se habrá logrado nada.

Debe considerarse: Que el año comience en enero y termine en noviembre o que pase de bimestres a trimestres, para ello hay que derogar el Decreto Ejecutivo 123 de 1958. Nuestro sistema educativo, está lleno de conflictos, por lo que vale preguntarnos: ¿Por qué? Intereses personales, económicos, politiquería, ideología de gobiernos, cultura nacional, sistemas educativos foráneos. ¿En dónde está el problema?

Los gobiernos deben pensar en beneficio del Estado–Sociedad y no en sus partidos políticos. El Ministerio de Educación debe estar alejado de la politiquería, de los intereses personalistas y paternalistas. La promulgación de normas legales que orienten al sistema educativo, las existentes no responden a las exigencias actuales, son conflictivas y otras inconstitucionales.

La “carga horaria” de los docentes, la cantidad de niveles y grupos que debe atender, la cantidad de estudiantes por grupos. Por alguna razón, exceptuando las pedagógicas y didácticas, nuestras escuelas fueron construidas en forma de enormes galeras, con cubículos cuadrados o rectangulares, llamados salones de clases, percibo que diseñados para admitir entre veinte y veinticinco estudiantes. La población estudiantil ha aumentado y en esos mini recintos, hay treinta y cinco y hasta cuarenta y dos estudiantes. Esto debe ser modificado de tal forma que no haya más de veinticinco estudiantes en cada salón de clases.

Para que estos cambios se ejecuten, se debe consultar con todos y no con unos cuantos ciudadanos y veremos que será posible sin peleas y sin que cueste doce millones.

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Este artículo se publicó el  30  de julio de 2010 en el diario  El Panamá América,  a quienes damos, lo mismo que al autor, todo el crédito que les corresponde.

In fraudem legis

La opinión del Jurista……

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Julián Morán

Normalmente, cuando algo no es claro o fácil de dilucidar, es necesario recurrir a las aclaraciones y estas tienen que basarse en argumentos lógicos, filosóficos, doctrinales, legales, psicológicos, dependiendo del asunto en discusión.

En el caso de las leyes se habla de la interpretación, que es la aclaración del sentido verdadero de la norma o parte de ella. Para ello se hace, por ejemplo, análisis literario, gramatical, sistemático e interpretación lógica, auténtica y estricta, de la excerta legal. Con esto, se busca entrar en la mentalidad del legista, ubicarla en el ordenamiento jurídico, en la doctrina y jurisprudencia y su aplicabilidad en cada caso.

Si esto no se da, estamos asistiendo al fraude, a la burla de la ley.   En nuestro país, hay hechos que, sin mayores detalles, entran en esta categoría:

Nombramientos de embajadores y cónsules que no pertenecen a la carrera diplomática y, por lo tanto, sin los requisitos, requeridos por ley, para ejercer el cargo.

En algunos ministerios e instituciones, se nombraron a personas que no son especialistas en las materias que deben tratarse, en esas entidades, a pesar de que la ley preceptúa determinados requerimientos para quienes ocupen estos puestos.

Las violaciones que se hicieron a las normas electorales, constitucionales, en el caso de la precandidatura a alcalde de Bosco Vallarino y su famosa doble nacionalidad.   Se inventaron razones, todas en contra de nuestra Constitución.

La Ministra de Educación justifica sus “recontrataciones” y contrataciones y el cambio curricular, con su emotividad o que lo hizo el gobierno anterior, olvidando lo que establece la Ley.

Las contrataciones directas se justificaron con los conceptos de “urgencia notoria” y “ya las había realizado el gobierno anterior” o “sólo fueron por unos dólares” o “son eficientes”, pero ¿la Ley?

La elección de los magistrados fue un círculo demagógico: cambios de normas, comisión seleccionadora-evaluadora, sociedad civil, solvencia moral y al fin de cuentas la norma Constitucional, el Presidente elige y la Asamblea de Diputados aprueba, por encima de advertencias y recursos legales.

El caso de la Procuradora General de la Nación, muchos lo han tomado para hacerse publicidad y darse de expertos.   La Constitución sigue siendo documento de uso sólo para intereses, conveniencia y de jactarse de ser defensores de los derechos humanos y la ley.  Hemos aprendido que muchos juristas saben más cuanto más se les paga y que la mitad de ellos trabajan en este país, ¡por amor a la ley!

La docencia jurídica ha estado a la orden del día, se han saturado los espacios radiales, televisivos, periodísticos, ¡qué lástima que estos próceres de la ley hayan callado tanto!, y hayan permitido tantas violaciones a nuestros derechos y a la Constitución.

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Publicado el 28 de enero de 2010 el Panamá América Digital. a quien damos, lo mismo que al autor, todo el crédito que le corresponde.

La educación: un comienzo

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La opinión del Abogado…..
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JULIÁN   MORÁN

El sistema educativo, ha ido, como las estaciones climáticas: De veranos prolongados a inviernos con tormentas y huracanes.

Se ha sugerido de todo: Reforma educativa, doble jornada, cambios en las estructuras académicas, textos, evaluaciones, aumento de horas o minutos clases, formación permanente de los facilitadores, laboratorios informatizados, aumento y disminución de los bachilleratos, traer la experiencia educativa chilena, finlandesa, japonesa.

Nuestro sistema educativo, está lleno de conflictos, por lo que vale preguntarnos: ¿Por qué?   Intereses personales, económicos, politiquería, ideología de gobiernos, cultura nacional, sistemas educativos, foráneos. ¿En dónde está el problema? ¿Por dónde comenzar el cambio? Por lo elemental:

Los gobiernos, deben pensar en beneficio del Estado–Sociedad y no en sus partidos políticos. El Ministerio de Educación debe estar alejado de la politiquería, de los intereses personalistas, de inventos. Hablo de especialistas y vocación.

Las concertaciones nacionales, sobre la educación, deben involucrar a todos. Debemos aprender que dos representantes de un movimiento, grupo u organización, no son todos ¿A dónde dejan a esos miles de educadores que sí tienen que decir sobre educación? Y ¿Qué de los sujetos de la educación?

Alguien ha sugerido ¿cómo cambiar la mentalidad de padres de familia y estudiantes con relación a la formación?   Sabe alguien ¿por qué nuestros jóvenes prefieren hacer de todo, menos leer?   ¿Por qué los acudientes no visitan las escuelas?   ¿Por qué a los estudiantes y acudientes les interesa más las calificaciones que el aprendizaje?

La promulgación de normas legales que orienten al sistema educativo, las existentes no responden a las exigencias actuales, son conflictivas y otras inconstitucionales.

La ejecución de la Descentralización, de lo contrario las Direcciones Regionales de Educación y Direcciones de Escuelas, pasarían como organismos innecesarios.

Los cambios curriculares deben responder a las necesidades del país, al ciudadano actual y futuro y no a los intereses ideológicos y económicos de particulares   ¿Cómo explican la reducción de bachilleratos y horas clases de Lógica, Filosofía, Ética, Historia? ¿Cuál es el sustento pedagógico de esto? ¿A dónde dejan las inteligencias múltiples?

Modificar las normas que regulan los nombramientos de Ministros, Directores Regionales, de Escuelas y Colegios, de Supervisores Nacionales y Regionales de Educación, ya que muchos (as) no responden a la visión de lo que es una institución educativa y carecen de las cualidades de un verdadero gerente educativo.

La “carga horaria” de los docentes, la cantidad de niveles y grupos que debe atender, la cantidad de estudiantes por grupos. La duplicidad de funciones: Atender tres niveles, quinientos o más estudiantes, coordinación de departamento, comisiones, consejerías, actividades extraordinarias (ferias, aniversarios)

El sistema educativo debe purificarse en todos los sentidos. Tal vez haya que ser menos politiqueros, menos paternalistas, menos inventores y más planificadores y visión clara de futuro.

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Publicado   el   18  de  diciembre  de  2009  en  el  diario  El  Panamá  América, a   quien  damos, lo mismo que al autor,  todo el crédito que le corresponde.

Un problema humano: mirar la brizna en el ojo ajeno

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Un problema humano: mirar la brizna en el ojo ajeno

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Julián Morán
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He sostenido que uno de los grandes problemas del ser humano es mirar el defecto ajeno. Aquí considero oportuno recordar al maestro de Nazareth, que expresó “¿Por qué te pones a mirar la astilla que tiene tu hermano en el ojo, y no te fijas en el tronco que tú tienes en el tuyo?”.

Me refiero a los concursos para optar por una posición laboral, hay leyes que regulan algunas de estas acciones, pero se les han agregado requisitos, unos sensatos y otros no. Ejemplo de esto: se habló sobre la certificación y recertificación de los médicos que aspiran a obtener su idoneidad.

Este anteproyecto no prosperó. ¿Quién lo propuso? ¿Cuál fue su finalidad? Surgió el examen para la idoneidad de los futuros abogados ¿De qué despacho surgió la idea? ¿Cuál fue el fundamento?

Ahora hay ministros sacando a concurso posiciones laborales, pero con algunos requerimientos: entrevistas y examen escrito, la pregunta es ¿con qué objetivo? ¿Por qué tanta carga para los demás?

Pregunto. ¿Por qué no se sacan a concurso las plazas para ministros, cónsules, embajadores? ¿A qué ministro y embajador se le hizo un examen escrito? Hay interrogantes, ¿quiénes son los culpables de que haya una pobre opinión de muchas instituciones públicas? ¿Nuestras autoridades están convencidas que, con estos procedimientos, las instituciones a su cargo serán eficientes, eficaces y menos burocráticas? Para mí ningún examen logrará medir cuánto sabe un ser humano, pero frente a eso hay que preguntar ¿qué se busca? ¿Conocimientos y procedimientos? ¿Experiencias? o ¿es que solo están atando pesadas cargas a los demás para que los aplaudan o para que nadie concurse y poder nombrar así a los suyos? ¿No dijeron algunos ministros, del gobierno actual, que solo era necesario la buena voluntad para ejercer una buena labor ministerial? Usted sabe ¿cuáles son los requisitos para ser Presidente de la República y para ser ministro? ¿No han justificado las designaciones de ministros, cónsules y embajadores con cualquier clase de argumentos?

Alguien limpio de corazón puede explicar el tema. Alguien que no esté mirando la brizna en el ojo de su prójimo, mientras en el suyo hay un tronco, puede explicar con lucidez el tema de los ejercicios parciales en los concursos laborales.

Son lamentables todos estos concursos con entrevistas, exámenes y currículos, ya que al final se habla del “preferido (a) del presidente o del ministro” .

Alguien dijo que había llegado la hora de que todo el que quería idoneidad o ejercer un puesto laborable, debía hacer un examen. Lo felicito por la genialidad, estoy de acuerdo, pero si se aplica a todos por igual, así tenga 15, 30 ó 40 años de ejercicio profesional, comenzando por ministros, viceministros, embajadores, cónsules, directores, subdirectores, nacionales y regionales de entidades públicas y así muchos se sentirán mejor, dado que ya nadie les podrá decir que fueron nombrados de “a dedo”.

“Y si tú tienes un tronco en tu propio ojo, ¿cómo puedes decirle a tu hermano: Déjame sacarte la astilla que tienes en el ojo?

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Publicado el 1 de agosto de 2009 en el diario La Prensa, a quien damos, lo mismo que al autor, todo el crédito que les corresponde.