La información es poder

La opinión del Educador retirado…

AZAEL ÁLVAREZ A.
opinion@laestrella.com.pa

Un proverbio francés dice que la información es poder y un adagio anglosajón asegura que el hombre informado vale por dos. E stos refranes, adagios y proverbios se vienen repitiendo a lo largo de los años y tal vez en siglos y milenios; los mismos emanan de la sabiduría popular y son considerados por la gente como verdades que apoyan consejos, críticas, pues se adaptan al sentir de quienes los emiten y también de quienes los reciben.

Estas frases memorables (proverbios) han jugado un papel importante en la evolución y desarrollo del lenguaje universal y se transmiten en todos los idiomas importantes conocidos.

No hay duda que la información es poder, recordemos que la prensa es el cuarto poder del Estado. Los periódicos han librado numerosas batallas, a lo largo de la historia del periodismo han ocurrido casos que vale la pena no olvidar tal como lo fue la investigación publicada por el Washington Post, periódico norteamericano que acabó con la presidencia de Richard Nixon. Caso este más conocido con el nombre de ‘Wattergate’.

Otro caso sobre el poder de la información, muy sonado fue cuando Juan Montalvo, escritor célebre, dijo: ‘Mi pluma lo ha matado’, en ocasión del suicidio del dictador Moreno, que el combatía con sus escritos, por los abusos de este gobernante de facto del Ecuador.

Poder inmenso tiene la información en las campañas políticas tanto que se dice que lo que no se anuncia no se vende. Por eso, en este sentido, se gastan miles de millones en el mundo. La comunicación cuesta caro. Pongámonos a pensar cuanto se gasta con las herramientas y aparatos en las tecnologías, nuevas y hasta viejas para hacer y agilizar la comunicación. Como ejemplo de ello citamos una sola cosa, los celulares que existen funcionando en Panamá y en todo el mundo.

Antes de terminar este artículo que espero que lo acoja La Estrella, decana de la prensa panameña, y el tercer periódico más antiguo después del Mercurio de Chile y el Comercio de Lima, Perú. Periódico este que antaño fui colaborador, deseo abordar algo sobre la noble labor del periodista y la importancia de defender la libertad de expresión, derecho que se debe considerar como sagrado aquí en Panamá y todos los países democráticos del mundo.

También decir y recordar la importancia de los valores tales como la honradez, honestidad, objetividad y todos los principios básicos del periodismo en general, consignado en los libros de ética, en manuales de redacción que existen para que se cumplan. Recordar que el mandato de la ley de Dios nos dice: ‘No levantar falso testimonio, ni mentir’.

Recordemos también que por calumnia e injuria la historia del periodismo registra graves conflictos y sentencias. Eduardo Chivás, prominente político cubano, -antes de Castro-, se pegó un tiro por no poder probar sus aseveraciones y comentarios, lo mismo le pasó a Getulio Vargas, ex presidente de Brasil.

Aquí en Panamá, hace ya mucho tiempo Aquilino Boyd, gran político tuvo que acudir a las armas de fuego, para resolver un conflicto según él de injuria o de calumnia.

Siempre debemos tener presente las leyes y normas sociales. Estos deben contar con la aquiescencia del público y nunca olvidar los preceptos y principios constitucionales tal como el que dice: ‘el poder emana del pueblo y lo ejerce el gobierno a través de los tres poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial; que trabajarán separadamente, pero en armónica colaboración.’

La prensa, -el cuarto poder-, está llamada a cumplir su rol con eficiencia y honestidad, siendo como lo es, agente vital del desarrollo del país.

Este artículo se publicó el 23 de enero de 2011   en el Diario La Estrella de Panamá, a quienes damos,  lo mismo que al  autor,  todo el crédito que les corresponde.