La educación en Panamá

La opinión de la Educadora….

ETTY GARCÍA

La educación en Panamá se ha tornado un reto para todos los que desean superarse como personas. Panamá carece de docentes que vayan a la vanguardia en busca de nuevos horizontes donde todos seamos partícipes de la calidad de educación permanente de la que se habla hoy por hoy.

Saber escuchar y ser escuchado es uno de los componentes que facilitan la comunicación entre los individuos. Por eso, cuando nos referimos a la implementación de la lectocomprensión, lo hacemos con la intención de que el docente se forme autodidacta, ya que necesitamos de ellos. Empero, se hace necesario reestructurar los programas educativos y emplear la Educación Didáctica.

No podemos recurrir a la llamada educación tradicional porque ya los paradigmas cambiaron; no podemos enfocarnos en una educación de calidad si no nos comprometemos a mejorar como autoridades, docentes, estudiantes, directivos y administrativos. Una educación sin calidad y permanencia, es una educación que no tiene sus cimientos bien marcados.

Muchos letrados han descrito que la educación debe iniciar en la casa, de una casa construida sobre la roca, en donde el individuo se sienta parte de ella. De allí, que la motivación hacia nuestra comunidad educativa sea fructífera, toda vez que no encasillemos el contexto, sino que lo dejemos salir como el agua que emana de los ríos y de los mares. Ser parte de este mundo compartido, nos sitúa en una base sólida, donde la arena ha sido uno de los elementos para construirla y fortalecerla. Pues, quien conoce que la educación es un sistema operatorio sabe que el aprendizaje se adquiere y no se incluye. Por un lado, observamos que si incluimos el aprendizaje, queda soso. Sin embargo, si lo adquirimos, logramos ponerlo en práctica.

Debemos hacer una reindexación en la educación. Pero, ¿cómo lo haremos? Unificando criterios, tomando del pasado y aprendiendo de él. Todos somos garantes de una patria con sentido humanitario, pero lo lograremos haciendo un trabajo en equipo y de equipo, en el que, sin dejar a un lado las solemnidades, preparemos a nuestros hijos e hijas para que gobiernen con sabiduría.

Una de las ventajas de la educación es que estamos cara a cara. Pues, todo docente conoce la realidad educativa del país y, al mismo tiempo, vive las situaciones sociales y económicas de sus alumnos. Es por ello, que si la batalla es entrar en los campos y enseñar bien, lo vamos a hacer porque todos los panameños nos merecemos una oportunidad, la cual está ligada a compartir el conocimiento.

<> Este artículo se reprodujo de la publicación del 16  de octubre de 2010 en el diario El Siglo,  a quienes damos,  lo mismo que al autor, todo el credito que les corresponde.