Día de la lealtad

La opinión del Miembro de la Juventud del PRD…

Félix Moulanier

Voy a escribirles sobre un valor importante y de trascendencia como lo es la “lealtad”, que se ha venido perdiendo a través del tiempo y que es necesario recuperar para que podamos vivir en sociedad de una mejor manera, en donde los valores y principios estén por encima de cualquier interés material y económico.

Según la Real Academia Española, “la lealtad es el cumplimiento de lo que exigen las leyes de la fidelidad y las del honor y hombría de bien”.   Desde nuestros orígenes, en la Biblia se castiga la falta de lealtad que Adán tuvo con Dios al tomar el fruto del árbol prohibido.    El ser leales es una gran enseñanza que Dios nos ha dado: una madre muestra lealtad a su hijo desde el momento en que nace cuando lo alimenta, lo cría, lo educa y lo protege; la misma lealtad la demostraron soldados y príncipes con sus reyes y con sus reinos desde la antigüedad; Jesucristo mostró lealtad con Dios Padre cuando fue tentado por el diablo y porque murió en la cruz para cumplir con su misión de salvar a todos los seres humanos de sus pecados.

Remontándonos a los hechos históricos ocurridos en nuestro país, quiero resaltar ese hecho, y gran muestra de lealtad de un pueblo con su gobernante y de un gobernante con su pueblo. Un 16 de diciembre de 1969, Omar Torrijos Herrera, después de haber recibido un golpe de Estado mientras estaba en México, sentía desde lo más profundo de su corazón el trabajo que tenía que realizar en Panamá y tomó la decisión, lleno de valor y coraje, de volver a su país arriesgando su propia vida.

Hoy vemos como diputados y autoridades locales electas venden sus conciencias a otros sin importarles la lealtad que un pueblo tuvo con ellos al darles el voto para sus postulaciones dentro de un partido en una elección democrática. También vemos cómo un gobierno compra a la clase política, atentando contra la democracia y la Constitución Política de un país. Vemos como gobernantes juran lealtad a su pueblo durante su primer día de mandato y terminan pisoteándolo, violando sus libertades y destruyendo el futuro de gente humilde y de escasos recursos con leyes que abrieron paso a lo que sucedió en Bocas del Toro y que violan los derechos fundamentales de todos los individuos que forman parte de nuestro país.

Concluyo diciendo que la lealtad es un valor que forma parte intrínseca del ser humano y que la calidad de una persona se mide a través de sus acciones de lealtad, de sus principios y de sus valores; solo así serán hombres y mujeres de convicción y de compromiso.

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<>Artículo publicado el 18  de diciembre  de 2010  en el diario El Panamá América,   a quienes damos,  lo mismo que al autor,  todo el crédito que les corresponde.