Alarmas ruidosas e inefectivas

La opinión de…

Juan Antonio de la Guardia E.  

Sé que tengo perdida esta causa, pero aún así, quiero levantar mi voz a ver si logro que más personas se me unan en la causa en contra de un invento que no tiene lógica y que, además, no soluciona el problema para el cual fue creado.

Recuerdo cuando salieron las alarmas para autos y me explicaban que en caso de que alguien intentara abrir el vehículo o robárselo la alarma sonaría, asustando al ladrón.  Yo no lo podía creer, no solo porque es una idea ilógica, sino porque no solucionaba el problema, más bien creaba otro, pero supongo que yo soy el único tonto que lo vio así.

La pregunta lógica sería: ¿Para qué quiero espantar al ladrón? ¿Acaso la idea no es apresar a los mismos? Ah, ya sé, soy el único tonto que piensa así. Es mejor pasarle el problema al vecino, y yo me limpio las manos. Por otra parte, las alarmas crean ruido innecesario, punto que no creo que debo aclarar. Suenan porque pasó un vehículo pesado y la vibración encendió la alarma, o porque un gato se subió al techo, o un niño lo tocó o cayó un rayo, o porque la lluvia es muy fuerte, etc.

¿No sería mejor que en vez de que suene una alarma sonara en nuestro celular? Así el ladrón no se da por enterado y podemos verificar si efectivamente hay alguien tratando de robar nuestro auto. De ser así, podemos no sólo llamar a las autoridades, sino que hasta podemos tomarle una foto con precisamente nuestro celular, porque ahora todos tienen uno y con cámara integrada.

Hoy en día, absolutamente nadie sale de su casa, oficina, centro comercial o cualquier lugar en donde se encuentre a verificar si es la alarma de su auto la que está sonando.   Peor aún, los buseros y taxistas las han incluido como parte de su repertorio de ruidos, algunos usándola a lo largo de la ruta. ¿Y las autoridades qué? Ah, y como si fuera poco, las alarmas de las empresas pueden sonar toda una noche o un fin de semana sin que nadie vaya a verificar, mientras los vecinos tienen que aguantarse el ruido porque al dueño o gerente le da pereza tener que ir a verificar o está de viaje.

<>

Este artículo se publico el 6 de julio de 2010  en el diario La Prensa,  a quienes damos, lo mismo que al autor,  todo el crédito que les corresponde.